Jennifer Aniston compartió un mensaje desgarrador en sus redes para homenajear a Matthew Perry, su gran amigo y compañero de Friends, que murió a los 54 años hace un par de semanas.
Aniston dijo haber experimentado una “ola de emociones demencial” tras la pérdida de su compañero. “Lo amábamos profundamente. Era una gran parte de nuestro ADN”, definió la Rachel de la serie y una de las más amigas de Perry, el actor fallecido.
En el posteo, además de compartir un texto extenso, Jennifer Aniston publicó una foto en la que ambos hacen la lectura del guion para un episodio de Friends, un fragmento de un recordado capítulo y un mensaje que Perry le mandó hace muy poco.
“Todos experimentamos una pérdida en algún momento de nuestras vidas. Pérdida de la vida o pérdida del amor. Ser capaz de SENTARTE realmente en este dolor te permite sentir momentos de alegría y gratitud por haber amado a alguien tan profundamente”, fu el comienzo de su reflexión.
Jennifer Aniston también contó que todo el grupo que hizo Friends era muy unido.
“Siempre éramos los seis. Esta fue una familia elegida que cambió para siempre el curso de quiénes éramos y cuál sería nuestro camino. Matty sabía que le encantaba hacer reír a la gente. Como él mismo dijo, si no escuchaba la ‘risa’ pensaba que iba a morir. Su vida dependía literalmente de ello. Y vaya si logró hacer justamente eso”, destacó la actriz.
Aniston también comentó que Perry siempre los hacía “reír mucho a todos”. Como ejemplo, compartió mensajes que intercambió con el actor 15 días antes de su muerte. “Reír y llorar y luego volver a reír. Los guardaré por siempre jamás. Un día encontré un mensaje de texto que me envió de la nada. Lo dice todo”, comentó.
En el intercambio de mensajes con ella, Perry le decía: “Hacerte reír me hizo el día”. “Awwww, la primera de MILES de veces”, respondió la actriz, y publicó varios emojis de caritas felices.
Aniston cerró el texto hablándole directamente al actor, donde quiera que esté: “Matty, te amo mucho y sé que ahora estás completamente en paz y sin ningún dolor. Hablo con vos todos los días. A veces casi puedo oírte decir ‘¿podrías estar más loco?’ Descansa hermanito. Siempre me alegraste el día”.